ADVERTISEMENT

ADVERTISEMENT

ADVERTISEMENT

crema de pollo y zanahoria

1 pechuga de pollo cocida
2 zanahorias medianas, cocidas
2 cucharadas de queso crema o ricotta
2 cucharadas de mayonesa (opcional, para mayor cremosidad)
1 diente de ajo (opcional)
Sal y pimienta al gusto
Un chorrito de aceite de oliva o jugo de limón para darle un toque especial.
Instrucciones
Cocine la pechuga de pollo en agua con sal y especias (puede cocinarla al vapor o hervida).
Hervir o cocinar al vapor las zanahorias hasta que estén tiernas.
En un procesador de alimentos o licuadora potente, agregue el pollo desmenuzado, las zanahorias cortadas en cubitos, el queso crema, la mayonesa, el ajo (si lo usa) y un chorrito de aceite de oliva o jugo de limón.
Licuar hasta obtener una mezcla suave y cremosa.
Ajuste la sal y la pimienta al gusto.
Sirva frío con pan tostado, palitos de pan, pita o galletas.
Variaciones

Para una versión más ligera, sustituye la mayonesa por yogur griego o olvídate de él. La pasta seguirá siendo cremosa, pero con menos calorías. También puedes añadir hierbas como perejil, eneldo o cebollino para darle un toque fresco y aromático.

Si prefieres un poco de textura, pulsa los ingredientes brevemente en lugar de mezclarlos hasta que estén completamente suaves.

Esto dejará pequeños trozos de pollo y zanahoria para un toque más rústico. Otra variación es añadir una pizca de pimentón ahumado o comino para un sutil sabor ahumado o terroso.

Para una alternativa sin lácteos, sustituye el queso crema o la ricota por aguacate o hummus. Esto no solo hace que la pasta sea apta para veganos, sino que también le aporta una textura única.

Experimente con diferentes especias o ralladura de cítricos para personalizar el sabor a su gusto.

Consejos

Para ahorrar tiempo, use pollo precocido o sobrante y zanahorias precocidas. Esto agiliza considerablemente la preparación.

Si usa pollo crudo, asegúrese de que esté completamente cocido y enfriado antes de licuarlo.

Para obtener la consistencia más suave, deje que los ingredientes se enfríen completamente antes de procesarlos.

Los ingredientes calientes pueden hacer que la pasta quede demasiado líquida. Si la mezcla está demasiado espesa, añada un chorrito de agua, caldo o aceite de oliva para aligerarla.

Pruebe la mezcla antes de servir y ajuste el condimento según sea necesario.

Los sabores se desarrollarán más después de enfriarlo, así que déjelo reposar en el refrigerador durante al menos una hora antes de servir para obtener mejores resultados.

Cómo almacenar

Guarde la pasta en un recipiente hermético en el refrigerador hasta por 3 o 4 días. Asegúrese de que esté bien tapada para evitar que se seque o absorba otros olores del refrigerador.

Si desea conservarla por más tiempo, puede congelarla hasta por un mes. Descongélela durante la noche en el refrigerador antes de servirla.

Tenga en cuenta que la textura puede cambiar levemente después de congelarla, así que revuélvala rápidamente o licúrela nuevamente si es necesario.

Para servir, utilice siempre utensilios limpios para evitar la contaminación. Si la pasta se separa un poco después de guardarla, simplemente revuélvala antes de servir.

Conclusión

Esta cremosa pasta de pollo y zanahoria es un plato sencillo pero sabroso, perfecto para cualquier ocasión. Su textura suave y sabor equilibrado la convierten en un éxito tanto para niños como para adultos. Además, es una excelente manera de reutilizar las sobras y crear algo nuevo y emocionante.

Ya sea que la disfrutes como dip, untable o relleno de sándwich, esta receta es infinitamente adaptable. Prueba diferentes variaciones y sugerencias de presentación para personalizarla. Fácil de preparar y aún más fácil de disfrutar, esta pasta untable se convertirá en un básico en tu cocina.

ADVERTISEMENT

ADVERTISEMENT

Leave a Comment