El flan de huevo es un postre clásico, famoso por su textura aterciopelada y su sabor sutilmente dulce. Aunque parezca sencillo (solo huevos, leche, azúcar y vainilla), puede salir mal si no se prepara con cuidado. Cocinarlo demasiado hace que se cuaje, mientras que cocinarlo poco le da una textura líquida.
Este método de natilla de huevo infalible garantiza resultados cremosos y suaves en todo momento. A continuación te explicamos cómo hacer una natilla de huevo perfecta desde cero, paso a paso.
Ingredientes
2 tazas (500 ml) de leche entera (o mitad y mitad para una crema más rica)
3 huevos grandes
½ taza (100 g) de azúcar granulada
1 cucharadita de extracto puro de vainilla
Una pizca de sal
Nuez moscada molida (opcional, para decorar)
Equipo necesario:
Cacerola mediana
Tazón para mezclar
Batidor
Colador de malla fina
4 a 6 moldes individuales (ramequines) o una fuente para hornear
Bandeja profunda para baño María
Horno
Preparación paso a paso
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