Con el uso diario, las hornallas acumulan grasa, restos de comida y suciedad difícil de quitar.
Muchos recurren al vinagre o al bicarbonato, pero existe un truco casero igual de efectivo y mucho más simple, que no deja olor fuerte y no necesita productos caros: limón con sal gruesa.
Esta combinación, además de ser económica, tiene un potente efecto desengrasante y desinfectante.
Qué necesitás
2 limones
2 cucharadas grandes de sal gruesa
1 esponja o fibra para fregar
Agua tibia para enjuagar
Paso a paso
VER PÁGINA SIGUIENTE
ADVERTISEMENT
ADVERTISEMENT